Soy la caja
(dime algo que no sepa)
y anhelo
un nombre verdadero,
estoy despierta y siento
que tengo todo
menos aquello que quiero
o realmente
no quiero nada
de lo que ya tengo.
Soy la caja
y conservo todos los gritos de este mundo
y de otros muy ajenos
también los secretos que escucho
lejanos
apartados
ocultos bajo tierra.
Soy la caja
y tengo un llanto aproximándose
mojando los gritos
los secretos
los tantos mapas del tesoro que supe recolectar
aquí esta mamá
aquí esta el amor
aquí esta mi voz
aquí esta
pero moje todo con mi llanto.
Soy una caja mojada
que ya no sirve para ocultar nada
(ocultar también
es un sinónimo
de cuidar)
¿puedo desechar todo?
si ya comprendí lo que es la muerte
¿puedo volver a vivir ahora?
¿algún día desenterrare de mi cuerpo todo aquello que sepulte?
lo que no quise ver
lo que no quise decir
lo que quise esconder
cuando quise huir
cuando no entendí
ni supe ver el amor
cuando no supe actuar
o moverme o gritar
cuando me paralice
ante aquella luz lejana
que me culpa
y me señala,
la ataje
la vi
la escondí bajo mi cama
para mirarla cada vez que me olvidaba
de su existencia.
Quiero tirarlo todo
quiero empezar de nuevo
¿me lo merezco?
¿puede desear merecerme esto?
¿podré algún día exiliar de mi cuerpo
esta incomoda y autoinflingida sensación
de no merecer absolutamente nada
de lo que deseo?