miércoles, 16 de septiembre de 2015

Del amor al odio... mi decepción.

Leí tu libro, ese que dice:" Nadie te reconoce. Nadie ve tu corona de cristal, nadie mira la alfombra de oro rojo que pisas donde pasas, la alfombra que no existe. Y cuando asomas suenan todos los ríos en mi cuerpo, sacuden el cielo las campanas, y un himno llena el mundo. Sólo tú y yo, sólo tú y yo, amor mío, lo escuchamos."
Leí tu libro y al terminarlo esta segunda pagina leída seguía siendo mi poema favorito. Podría llamarte un defensor del amor, realmente yo me creía tus palabras cuando, en otro libro, escribiste: "La poesía es siempre un acto de paz", cuantas veces pensé en lo bueno que hubiese sido conocerte, pero hace ya varios años que tu vida termino dejándonos a todos nosotros un montón de poemas hermosos que podremos leer durante muchos años. Sos un escritor infinito, de eso no quedan dudas.
Hasta hoy, para mi, Neruda. 
Que alguien de tu calaña haya sido capaz de decir que "la poesía es siempre un acto de paz" es la razón por la cual existe la palabra HIPÓCRITA. 
"Confieso que he vivido", tu libro, no es mas que una declaración jurada de la clase de persona que fuiste, no se puede dudar de tu forma de escribir, del arte que llevabas en las venas, pero que valor puede tener eso cuando al tener a alguien débil frente a ti decides herirlo y no ayudarlo. ¿Cuanto puedes tener como persona cuando de tus manos, aquellas manos que tocaron a esa india sin que ella lo quisiera, salen palabras como "amor", "paz" y "poesía"? 
Yo no quiero leerte. 
Así no. 

Esto no es una critica, es solo una forma de consolarme a mi misma, se que todavía hay gente que dice ser buena y realmente lo es... ¿Pero cuanta? ¿Por cuanto tiempo? ... 


No hay comentarios:

Publicar un comentario