domingo, 18 de febrero de 2018

Inmortalidad

Cuando me animo por primera vez a escribir sobre algo,
al recordar la situación que hice poema
se me viene a la mente lo que escribí
entre flashbacks del recuerdo.
Y me sucede siempre
con todo lo que he escrito
con cada situación que puse en palabras.
Escribir es todo un momento,
por no decir todo un reto,
te sientas y piensas
mientras dejas que tus dedos se muevan.
Es como si no tuviera realmente el control de lo que escribo,
como sin darme cuenta termino escribiendo quizás
cuatro hojas y muchas lagrimas,
o sonrisas.

A veces me duele mas lo que escribí que el propio recuerdo inspirador,
porque el recuerdo podría ser olvidado
pero lo que escribí tiene todo de mi
tiene mi tiempo, mi mente, mi alma y el espacio para existir.
Por eso escribir a veces es peor que no hacerlo
¿Quiero hacer este sentimiento inmortal?
¿Realmente quiero recordar esto siempre?
a veces ni si quiera lo pienso, solo dejo que mis sentimientos me lleven
al punto final
que culmina con algo que ahora, consciente, no quiero publicar.
Pero aunque me lleve un tiempo
siempre gana el corazón,
siempre gana ver el titulo de algo que escribí,
-con todo lo que ame escribirlo-
encerrado en una casilla que reza "borrador".
Un montón de mis sentimientos encasillados en la palabra "borrador",
un montón de inmortalidad encerrada.

Y al fin y al cabo
publicar se siente aun más liberador.



jueves, 8 de febrero de 2018

En caso de que te pierdas:

Cuando te vi por primera vez, prendiste una vela dentro de mi que no pude apagar, ni quiero.
Sentí que no eras parte de este mundo ni de ninguno. Jamas creí en un "mas allá", ni en reencarnaciones, pero al verte podría haberte jurado que te conozco, que se exactamente quien eres.
El incendio que creaste dentro de mi me mantiene en constante luz, y sin quererlo, sin esfuerzo, casi todos los días algo me ha llevado a recordarte. Incluso este impulso extremadamente fuerte de escribirte me es inexplicable y lo venia evitando, no por alguna razón en especial, sino porque no se exactamente que decirte, o quizás mi subconsciente si tiene algo que escribir, y yo, llegando a esta linea aún no lo se.
Pero por si te pierdes, en un futuro, cuando te lean cuentos para dormir, quizás te lea este poema, quizás al mirarte a los ojos al terminarlo vos entiendas mejor que yo que es lo que quiero decir, quizás lo sepas, tal vez sepas qué causas en mi con tus ojos. No es fácil mirarte, los clavas, apuntas en mi y disparas. Me mantengo alejada porque la energía que hay en vos repercute demasiado en mis entrañas. Tenes un no se qué que llego a vos desde tu nacimiento, algo que traes de otro espacio, galaxia, planeta o donde sea de donde vengas. Siento que juzgas, que atraviesas a la gente y le curas las tristezas con tu risa, o al menos eso me paso a mi.
Cuando te vi por primera vez y te sostuve en brazos, llore. Y no solo paso esa primera vez. Tuve la suerte de ser alguien cercano a vos, y había días muy cortos donde nos divertíamos, y esos días cuando sonreías intensamente, lloraba, a veces de una angustia que no entendía, otras de felicidad.
Sos hermosa y no me refiero a tu físico, a esa parte de vos que es lo primero que se ve, porque yo nunca me guió por lo primero que veo sino por lo que siento.
Bebe, semanas de vida, la mirada mas atrapante que vi en mi vida, la sonrisa mas contagiosa de todas, la mas valiosa.
Meses, miedo, como si supieras de tu crecimiento, te alejabas de la gente que no conocías y en quienes todavía no confiabas.
Año. Sigo sin entender como lo haces, causas sensaciones en mi que no comprendo.
Te amo, me hiciste amarte de una manera en la que nunca ame a nadie mas que a mi único hermano. Me preocupas, vos, tu sonrisa, tu fuerza, tu llanto, tus palabras, tus acciones; sos como ese mejor amigo de toda tu vida que un día desapareció y ahora volves a verlo, así me siento, como si verte fuese algo especial y único.
No se que tenes, pero se que sos grande, me siento en la obligación de resguardar tu sonrisa con palos, piedras y poemas, y lo haré.
Por eso, por si algún día te pierdes, búscame, ven a mi y yo haré lo que sea para poder verte crecer con la grandeza con la que naciste. Fuerte, brillante, siendo luz.